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¿Qué es la bulimia?

13/05/2022

La bulimia se trata de un trastorno alimenticio caracterizado por los atracones; episodios en los que la persona afectada consume grandes cantidades de comida, cuyo contenido calórico buscará evitar por medio de conductas compensatorias como el vómito auto-inducido, el ayuno irresponsable o el consumo de laxantes.

Bulimia nerviosa

El término correcto para referirse al trastorno es bulimia nerviosa, puesto que también es un padecimiento psicológico. Numerosos casos han surgido en grandes áreas industrializadas de los cinco continentes. Las primeras referencias nosológicas de la enfermedad se remontan al siglo XX.

Posee una tasa de mortalidad del 5%.

Aunque puede afectar tanto a hombres como a mujeres, es más habitual entre el sexo femenino; incidiendo especialmente en niñas, adolescentes y adultas jóvenes.

Síntomas de la bulimia

Los atracones son el síntoma principal del trastorno. Dichos episodios tienden a aumentar a lo largo de los meses, presentándose varias veces al día. Al no poder controlar su alimentación, la persona busca ingerir generosas cantidades de comida rica en calorías, siempre en privado.

El atracón se convierte en una acción mecánica que solo acaba al terminarse la comida, o cuando sucede algo que desvía la atención de la persona, (recibir llamadas, mensajes, sentir dolor de estómago). Le sustituye una sensación temporal de alivio.

Este descontrol es provocado por sentimientos de culpa y rechazo. En su esfuerzo por eliminar las calorías consumidas, un individuo con bulimia suele recurrir a métodos perjudiciales:

  • Vómito provocado.
  • Uso de diuréticos, laxantes y/o enemas.
  • Ejercicio excesivo.

Las señales a las que hay que estar alerta incluyen:

  • Apetito en exceso.
  • Tener hábitos extraños al comer, (jugar con la comida u ocultarla en sitios inusuales, rechazar ciertos alimentos, contar la comida, etc).
  • Inducirse el vómito en secreto.
  • Cicatrices en la zona trasera de los dedos, (por la inducción del vómito).
  • Ingerir y/o comprar alimentos en grandes cantidades, que se acaban con rapidez.
  • Pasar demasiado tiempo en ayunas o practicando ejercicio.
  • Ir al baño inmediatamente después de comer.
  • Menstruación irregular o ausente.
  • Depresión y ansiedad.
  • Cambios de humor repentinos.
  • Insatisfacción personal y rechazo de la apariencia corporal.
  • Preocupación excesiva por la comida y el peso.
  • Vergüenza al comer en público.
  • Encontrar cajas de productos como laxantes, diuréticos, pastillas para adelgazar y fármacos eméticos o vomitivos.

Es común que quienes padecen bulimia mantengan un peso (relativamente) normal, si bien su auto-percepción no corresponde con la realidad. Debido a ello el padecimiento puede pasar desapercibido, a no ser que otros trastornos y/o enfermedades lo compliquen.

Diferencia entre bulimia y anorexia

La bulimia comparte varias similitudes con la anorexia y en muchos casos, ambos trastornos van de la mano, lo cual podría complicar su diagnóstico y distinción.

No obstante, también guardan sobresalientes diferencias entre sí:

  • La anorexia se divide en dos subtipos distintos a los de la bulimia: purgativa y restrictiva.
  • Por lo general, la anorexia nerviosa tiene un inicio más temprano, comprendiendo un rango de edad entre los 13 y los 20 años.
  • Los inicios de la bulimia suelen ser tardíos, entre los últimos años de adolescencia y los primeros de la edad adulta.
  • A menudo, la pérdida de peso repentina es más notable en quienes padecen anorexia.

¿Qué tratamientos hay para la bulimia?

No es común que las personas bulímicas sean internadas, a menos que presenten un cuadro grave del trastorno o padezcan depresión severa. Un diagnóstico temprano aumentará las posibilidades de recuperación.

El tratamiento para la bulimia se lleva a cabo por pasos:

  • El primero es la evaluación del paciente, mediante el enfoque farmacológico y psicoterapéutico. La administración de fármacos nos permite regular los atracones y comportamientos de purga. La psicoterapia tiene como objetivo mejorar la autoestima y el desequilibrio emocional.
  • Posteriormente se recurre al asesoramiento nutricional, con el cual se plantean hábitos de vida saludables. El paciente recupera el control de su alimentación, aprendiendo a llevar una dieta apropiada sin restricciones.

La rehabilitación para la bulimia es un proceso doloroso en el que se requiere la cooperación de la familia. Unirse a un grupo de apoyo es muy recomendable; los pacientes con bulimia reaccionan mejor al compartir experiencias con gente que pasa por su misma situación.

Consecuencias a largo plazo de la bulimia

Un cuadro de bulimia que no es tratado a tiempo conlleva grandes riesgos para quien lo padece. Las principales complicaciones incluyen:

  • Daños intestinales estomacales.
  • Amenorrea (ausencia del período menstrual).
  • Disminución de la densidad ósea y muscular.
  • Desgaste dental.
  • Complicaciones renales a causa de la deshidratación.
  • Dificultades para embarazarse.
  • Insuficiencias respiratorias y cardíacas.

Los problemas del corazón suponen una de las consecuencias más graves, debido al riesgo mortal que representan.

Causas de la bulimia

A día de hoy es imposible definir una causa específica de la enfermedad. Generalmente, se asocia la intervención de múltiples factores como el estado psicológico del paciente, sus antecedentes genéticos y relaciones personales, a los que suele sumarse su entorno social y cultural.

Consecuencias de la bulimia

La bulimia tiene varios efectos negativos para la salud, cuya gravedad empeora conforme pasa el tiempo. A corto plazo, los más comunes son los siguientes:

  • Hinchazón de cara y garganta.
  • Malestares estomacales.
  • Dolor de garganta.
  • Pérdida de líquidos corporales.
  • Mareos y desvanecimientos.
  • Fluctuaciones del peso corporal.
  • Problemas de autoestima.

Tipos de bulimia

La bulimia se divide en dos subgrupos:

  • Se distingue por el vómito auto-inducido periódicamente, o bien provocado con productos farmacéuticos como laxantes, enemas, diuréticos y medicinas catárticas, que estimulan el movimiento intestinal.
  • No purgativa. Para disminuir la absorción de calorías se recurre a métodos más convencionales, como lo son la práctica inadecuada del ayuno o hacer ejercicio en exceso.

Significado de bulimia

La palabra del trastorno se desprende del latín bulimia, que tiene sus raíces en la misma palabra del griego βουλιμία (bulimía). Dicho término se compone de los vocablos “bus” (buey) y limós (hambre), lo que vendría a ser: hambre de buey.

Esto hace referencia a los episodios descontrolados que se sufren en la enfermedad.

Enfermedades derivadas de la bulimia

La bulimia puede derivar en múltiples padecimientos graves. Los casos más avanzados facilitan la aparición de enfermedades como las siguientes:

  • Osteoporosis
  • Anemia
  • Padecimientos renales.
  • Trastornos cardíacos (hipotensión, arritmia, etc).
  • Trastornos gastrointestinales (colón irritable, pancreatitis, hernia de hiato, etc).
  • Trastornos obsesivos compulsivos.
  • Trastornos anímicos (ansiedad y depresión, entre otros).

Como empieza la bulimia

Es común que una persona bulímica comience por planificar su alimentación para bajar de peso, traspasando los límites recomendables. Las dietas restrictivas y la preocupación obsesiva por el peso, son una constante que antecede al trastorno.

La pérdida de control constituye la siguiente fase. El estrés emocional vulnera la voluntad de la persona ocasionando los característicos atracones, episodios en los que se consume una cantidad de alimento exagerada por períodos cortos de tiempo (menos de 2 horas); normalmente “comidas prohibidas” como pasteles, fritos, golosinas, etc.

Las conductas compensatorias constituyen la última fase del trastorno.

Cómo tratar la bulimia

Un especialista podrá determinar cual es el tratamiento más adecuado para una persona bulímica. Factores como la edad, el historial clínico y el estado general de salud, deben tomarse en cuenta para cada caso individual, así como la gravedad de los síntomas.

La terapia individual y familiar, la rehabilitación nutricional y la modificación de conducta, son las medidas más habituales al tratar a pacientes con bulimia. La ingesta de ansiolíticos y antidepresivos se recomendará si existen trastornos anímicos.

Efectos secundarios de la bulimia

Son diversas las complicaciones que se desprenden de la bulimia. El vómito provocado ocasiona inconvenientes como:

  • Caries dental.
  • Hinchazón de garganta.
  • Acidez estomacal (con daños permanentes).
  • Escisiones en el esófago.

El uso de medicamentos no controlados como laxantes o enemas, incrementan sus posibles efectos secundarios, entre los que se encuentran:

  • Estreñimiento.
  • Hemorroides
  • Daño pancreático.
  • Deshidratación.
  • Disminución de los niveles de potasio en la sangre.
  • Problemas cardíacos.
  • Erosión en los dientes.

Cabe mencionar también que el trastorno afecta de manera negativa el funcionamiento social de todo paciente.

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